A Veces Viajo

Imagen de un Latke en Budapest - Foto A Veces Viajo

A comer!

Cuando tenemos la oportunidad de viajar además de conocer otras culturas distintas o similares a la nuestra, también tenemos la posibilidad de experimentar nuevas sensaciones y entre esas nuevas sensaciones está la posibilidad de probar comidas. La mayoría de estas comidas que les voy a presentar hoy no se comen en restaurante, porque también cuando vamos trillando ciudades y paseando, que dos días acá, tres allá, a veces es más fácil (y más barato) comprar algo de paso que ir a un bar o restaurant a sentarnos y a almorzar o cenar.

Así que sin más preámbulos...

Budapest:

Si esta parte les suena conocida es porque ya hablé de estas dos comidas acá.

Había sacado una bici con una app para alquilar bicis por tiempo que lo que está bueno es que se pueden levantar y dejar casi que por cualquier lado, además de que se tranca/destranca desde el celular por lo que es muy cómodo. Bueno, el plan era ir al parque Varosliget por la mañana y después para la hora del almuerzo trasladarme al Mercado Central. Todo venía perfecto hasta que llegué al Mercado y estaba cerrado. Quiso la suerte que enfrente había como una pequeña plaza de comidas callejera que consitía en unos kioscos de madera que ofrecían algunas comidas al paso.

Lo primero que uno piensa en Hungría es el famoso Goulash, pero cuando fui me encontré con los Potato Pancakes (panqueques de papa) o como descubrí que se llamaban después, Latkes. Los Latkes son como un buñuelo de papa chato y frito al que se le agregan diversos sabores. No es una comida de origen húngaro sino más bien judío y, la versión que probé, consistía en una pasta de papa rallada y mezclada con cebollas y huevo. Con eso se arman discos que se fritan y luego de estar bien dorados se les pone una salsa, queso y, el que yo comí y que encabeza este post, era de verduras. Muy rico la verdad y la mezcla con las verduras le da frescura y aliviana un poco lo frito.

Luego de ese fugaz almuerzo me pasé al postre que también compré en los mismos kioscos y fue, esta vez si, algo más típico húngaro. Así que me compré un Kürtőskalács, que por suerte no tuve que pronunciar para pedirlo. Si bien su origen es rumano, es bastante típico de esta región, al fin y al cabo Rumania es al lado de Hungría. El Kürtőskalács es esencialmente un pan dulce con especias, más que nada canela y un toque de limón, o así lo sentí yo. Se preparan unas tiras de masa que luego se enroscan en unos cilindros con unos fierros largos y se cocinan girando sobre una cama de brasas. Son grandes, como para compartir, y después que se enfrían no son tan ricos como cuando todavía están calentitos. Por su forma cilíndrica, y porque al salir de las brasas largan humo por el centro, se los conoce amigablemente como "postre chimenea".

Kürtőskalács o postre chimenea - Foto A Veces Viajo

Berlín:

En Berlín se puede comer muy bien, de hecho el primer día me fui a almorzar al barrio de San Nicolás (Nikolaviertel) y paré en una cervecería muy bonita que está muy bien ubicada con el Spree corriendo a su lado. Comí Geschmorte Schweinehaxe (codillo de cerdo estofado) acompañado de unas papas asadas con chucrut y una buena jarra de cerveza negra artesanal porque en este lugar hacen su propia cerveza. Esto estaba realmente delicioso y abundante, pero no es barato, hablamos de unos 25 euros propina incluida. Sobre el lugar decirles que está muy bien y el personal de servicio es excelente y hablaban inglés y algo de español también.

También en Berlín fui engañado por algo que creí que era una milanesa al pan. Bueno, en realidad no fui engañado sino que yo solo me hice la idea. Había ido a una feria en el barrio donde me estaba quedando (Friedrichshain) para ver si encontraba algo para almorzar. Este mercado es los sábados en la plaza Boxhagener Platz y venden alimentos, artesanías, discos (muy baratos), en fin, una feria o mercado. Luego de dar una recorrida mis ojos se posaron en una vitrina que exhibía milanesas al pan y como buen uruguayo no se le puede decir que no a una milanesa al pan. Pero luego de dar el primer bocado... Resultó que estaba comiendo Mücver o Zuchinni Püffer (en alemán) una comida turca similar en su elaboración al Latke de Budapest aunque su ingrediente base es el zucchini. También lleva papas y huevo, pero es más condimentado que el otro y en este caso se servía al pan, tipo sandwich y con una salsa que le daba como un picor extra. Así que no comí milanesas pero descubrí algo rico y distinto.

Pero la gran vedette de la comida callejera en Berlín es el currywurst que se puede encontrar casi que en cualquier lado. El currywurst es bien simple, una salchicha frita que te la bañan en ketchup con curry. Puede venir solo o acompañado con papas fritas. Para nada recomendable en días de calor o si andan medio flojos del estómago ni tampoco para comerselo de "postre" después de un Mücver como hice yo.

Cerveza negra artesanal en Berlín - Foto A Veces Viajo

París:

Aaahhh, la cuisine francesa, toda una sofisticación, ¿verdad? Acá fue donde me animé a algo realmente distinto y probé los escargots. ¿Qué que son los escargots? Los queridos caracoles de tierra que visitan los patios después de un día de lluvia. En mi vida me imaginé que me iba a comer un caracol, ya su consitencia no me agrada mucho, pero la verdad es que están bien, no me parecieron un manjar, pero no son para nada feos. Es un plato de entrada se preparan con mucha manteca y hierbas. Te los sirven dentro del caparazón y se sacan con un pequeño tenedor.

En París también probamos el Tartiflette, aunque no fue en ningún lugar particular sino de elaboración casera. Este plato, que se consume más bien en invierno, consta de queso reblochon, bacón, papas hervidas, cebolla, crème fraîche o crema de leche. Se hierven primero las papas y luego se cocina todo junto al horno, se gratina el queso y está pronto. Se darán cuenta por sus ingredientes por qué les dije que es un plato más de épocas frías, bastante graso y contundente.

Tartiflette - Foto por margouillatphotos para iStock

Bruselas:

Creo que el plato más famoso son los mejillones con papas fritas, pero no vamos a hablar de eso, sino de otro plato de esos al paso y bien fritos y pesaditos, porque ya desde el nombre del lugar te están avisando. Fue culpa de la guía de un tour a pie que comentó que detrás del edificio de la Bolsa de Bruselas estaba este lugar y ahí servían algo llamado Mitraillete (ametralladora) y con un nombre tan peculiar no se podía no ir a degustarlo. Es muy simple, dentro de un pan baguette van: hamburguesa, muuuuucha cebolla salteada y papas fritas, todo regado con una salsa de tu elección. Sobre las salsas, luego de consultar a algunos locales y de probar algunas la que me gustó más fue la Andalouse que es como una mayonesa pero meido picante y si no entendí mal es de origen belga, o sea que de Andalucía el nombre nomas.

Pero les dejo el menú con todas las fritangas hermosas que ofrecen:

http://www.fritlandbrussels.be/sites/default/files/imagecache/lightbox_fullscreen/global/pages/MENU_ENG/MENU_Fritland_Anglais.png
Menú Fritland - Sitio Oficial Fritland

Santorini y Atenas:

Para cerrar nos venimos a Grecia donde probamos dos comidas muy similares, los Gyros y los Souvlakis.

Los Gyros los probamos en Santorini en un pequeño local atendido por su propio dueño que resultó ser un pintoresco personaje. Sería el primo hermano del turco Kebab porque es carne especiada (cordero o cerdo) al pincho que se sirve envuelta en un pan de pita con vegetales y la clásica salsa de yogurt. En particular en este lugar les agregaban papas fritas dentro también. Comida simple, rápida, barata y rica; infalible.

El Souvlaki es como que fuera un Gyro desarmado, aunque creo que se pueden pedir al pan también. Este lo probamos en Atenas y consiste en una brochette de carnes (también cocinadas al pincho) pero cambian los vegetales que en este caso también van asados e intercalados con los trozos de carne. Se pueden acompañar (cuando no) con papas fritas o también con arroz pilaf. También es muy rico por supuesto.

Foto por Markus Winkler para Unsplash

Y con este delicioso Souvlaki damos por cerrada esta primera entrega de comidas que tendrá una segunda parte con algunas cosas probadas por Sudamérica.

Nota: A Veces Viajo no recibe dinero ni nada a cambio por los enlaces a los lugares mencionados acá, es simplemente compartir una opinión y experiencia personal.